« Abedul: Árbol de la familia de las betuláceas, de unos diez metros de altura, con hojas pequeñas, puntiagudas y doblemente aserradas y dentadas, corteza lisa y plateada, ramas flexibles y colgantes. Abunda en los montes de Europa. El fruto es una sámara, con dos alas de igual tamaño. La savia concentrada se utiliza para elaborar vinos caseros. Se aplica en contra-chapados y muebles curvados. Blanco, entre amarillento y rojizo. Vetas cortas y compactas. Es fuerte y se trabaja bastante bien. Se pudre pronto. Abedul amarillo: Es el más valioso de los abedules nativos. Es reconocido fácilmente por la corteza del amarillento-bronce para la cual se nombra. La corteza interna es aromática. Otros nombres son Abedul gris, Abedul de plata, y Abedul del pantano. Este árbol duradero de crecimiento lento se encuentra con otras maderas duras y coníferas en los suelos bien drenados húmedos de las altiplanicies y de los barrancos de la montaña. Es una fuente importante de la madera de construcción de la madera dura, pues posee muy buena resistencia a la flexión, como a la compresión y al impacto. Se utiliza en muebles, ebanistería, puertas, suelos, torneados y juguetes. Es buena para torno y soporta también bien la talla, en Asturias es empleada para hacer una especie de calzado, que se empleaba mucho en el campo en tiempos pasados, llamado madreñas.»[1]
Fuentes de referencia del término arquitectónico:
[1] (Calatayud C., Manuel, Gonzalez S., Maestro D., & Mestre P., 2006)
Terminología Arquitectónica 